miércoles, 25 de marzo de 2009

EL DESEO SEXUAL



El deseo sexual constituye para los swingers un ámbito independiente al amor. Sólo al interior de la pareja ambas dimensiones se conjugan. En sus encuentros hay sólo un intercambio de sexo, mientras que el amor está reservado para la propia pareja.
En la práctica swinger se entiende que nada se pierde en el goce sexual de la pareja con otra persona, sino que, por el contrario, mucho puede ganarse.


Las actividades de intercambio de pareja, incluyen:


- El observar a otros cómo se relacionan sexualmente.
- Tener sexo con tu pareja mientras eres observado.
- Besar, acariciar, o tener sexo oral con una tercera o cuarta persona (llamado intercambio suave "Soft Swing").
- Tener penetración sexual con algún otro además de tu pareja (intercambio total "Full Swap" lo cual es la definición comúnmente entendida de intercambio de pareja).

1 comentario:

  1. Estaría dispuesto a ir al sitio, observar, comentar con mi pareja, cómo se siente ella ante tal situación de observadora, pues si la pareja de entrada se siente muy incómoda, es muy difícil dar el siguiente paso. Considero que si hablando en varias oportunidades, como fantasía y si se puede llegar a un acuerdo de dar el siguiente paso, es muy posible que los siguientes pasos ya se den poco a poco. Se debe estar muy seguro de la otra persona, ya que se puede dar que tu pareja pueda resultar sentimentalmente atraída hacia otra persona. Si la otra persona es una mujer, no hay mucho peligro de perderla, pero, si es otro hombre, ahí es posible que se pueda quedar sin ella. Prefiero que mi mujer resulte con otra mujer. Si está claro que es sólo sexo, se puede tener algo más de control. En alguna oportunidad con una novia que casi fuera mi esposa, estuvimos a punto de llevar a cabo un intercambio de pareja, pero ella se retractó por el temor a perderme y que a ella le quedase gustando el tener sexo con otras personas aún estando los 2; pues ella misma aceptaba declararse muy activa en proporcionar el sexo oral a la otra persona, en este caso a mí. Y es que ver a la mujer que se ama, dar sexo oral a otra, puede ser muy excitante la idea, pero, y si a ella le queda gustando succionar el pene del otro hombre?, no es fácil aceptarlo, los celos salen a flote y es doloroso para los sentimientos.

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